Mito 13: La trata de personas implica violencia y confinamiento. Si las
personas pueden moverse libremente, entonces no son realmente víctimas
de trata.
Realidad: Si bien la trata de personas implica violencia, ésta se puede manifestar como coerción, manipulación o amenazas. Aún si la víctima es “libre” para moverse, los tratantes controlan sus movimientos, por ejemplo reteniendo tanto el pasaporte como cualquier otro documento que les permitiera escapar.